Toni Carmelo es ya una leyenda viva tras su épico viaje a caballo desde Gerona a Lisboa en el año 2019. Militar de carrera desarrolló las habilidades y el instinto para convertirse en un auténtico viajero a caballo, más allá de una disciplina ecuestre, una indómita forma de vida para los que van en busca de la aventura y emociones intensas.
Gracias por compartir con nosotros esta entrevista, Toni.
¿Cómo fueron tus inicios con los équidos?
Gracias a ti, Jorge, por darme la oportunidad de participar en este
ciclo de entrevistas tratando un tema, que de sobras sabes, me apasiona
desde siempre, como es el caballo y todo lo relacionado con este hermoso
y formidable ser.
Respondiendo a tu pregunta te diré que la afición o mejor dicho el amor
por los caballos lo tengo desde siempre, pero no fue hasta que ingresé
en la Academia General Militar allá por el año 1976 cuando tuve mis
primeros contactos serios con el caballo, ya que
la Equitación formaba parte, como asignatura, del plan de estudios del
cadete.
Mas tarde, ya con mi empleo de teniente de artillería, me especialicé en
montaña y durante mas de 15 años estuve destinado en unidades de
montaña donde el caballo y los mulos era nuestro medio de transporte y
los Pirineos la principal zona montañosa por donde
nos movíamos. En esa época, años 80 y ya de capitán, realizaba salidas
de vida y movimiento en montaña tanto en época invernal como estival de 8
días de duración con mi batería de cañones al mando de 120 hombres con
30 caballos y 60 mulos donde transportábamos
los cañones de 1.100 kilos de peso en 12 cargas y el resto de material
necesario para vivir y hacer la instrucción.
Siempre he dicho que las unidades a lomo de montaña eran unas auténticas
escuelas de formación personal, pues tanto el medio donde nos movíamos
como el medio que utilizábamos para movernos, es decir, la montaña y el
ganado equino, podían presentar en cualquier
momento cualquier tipo de incidencia difícil de resolver.
Realmente fue una etapa muy bonita de mi vida profesional que la pude
alternar compitiendo en varias disciplinas ecuestres: salto, raid,
concurso completo y doma clásica.
En el ejército español, ¿todavía se utilizan caballos y mulas o es algo del pasado?
Aunque las unidades de montaña siguen existiendo, estas en la actualidad
cuentan con medios mecánicos muy sofisticados de transporte y el
caballo y los mulos han pasado a formar parte de nuestra historia
reciente.
Tan solo disponemos de la unidad Montada de la Guardia Real y del
Servicio de Cría Caballar, el cual ya ha cumplido mas de 150 años al
servicio de España.
El Servicio de Cría Caballar
es una institución de reconocido prestigio, de gran utilidad y
proyección social gracias, fundamentalmente, a las paradas públicas de
sementales cuya principal función es mantener el buen estado
de la cabaña equina española y proveer de caballos a las Fuerzas
Armadas y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
¿En qué consiste viajar a caballo?
Viajar a caballo es una actividad que consiste en recorrer un territorio
durante un tiempo determinado a lomo de un caballo o mula con la
finalidad de trasladarte con tus propios medios de un lugar a otro,
combinando aspectos lúdicos, culturales, deportivos
y aventureros.
A diferencia del turismo ecuestre, en el viaje a caballo el jinete es
totalmente responsable de las facetas de la actividad. Es él y solo él
quien resuelve los problemas e incidencias que se le vayan planteando
antes, durante y después del viaje, apelando a
sus propios conocimientos, recursos y experiencia. Debe, por lo tanto,
ser completamente autónomo y a la vez senderista y hombre o mujer de
caballos.
El viaje a caballo nos hace “libres, fuertes y nómadas”. “Libres” porque
es el jinete/viajero el que planifica su propio viaje y toma sus
propias decisiones frente a las dificultades e imprevistos. “Fuertes”
porque el viaje lo realiza junto a sus compañeros
equinos que en una simbiosis sin igual el caballo transmite su
fortaleza al jinete, es decir transforma al jinete en un centauro. Y
“Nómadas” porque el viajero a caballo se traslada de un lugar a otro sin
establecerse en ningún sitio de forma prolongada.
¿Qué buscas en tus caballos y mulas, cómo los preparas, cómo consigues tener una manada tan compenetrada?
Cuando adquiero un equino las condiciones que me impongo son las
siguientes: que sea joven, que no haya sido domado ni, por supuesto,
montado, y finalmente que nunca haya sido herrado ni conozca las bridas
con hierro. Como dice Craig Cameron, lo mismo que los
grandes hombres a caballo no nacen sino se hacen, los grandes caballos
(y por supuesto mulas) también se hacen. A veces nos preocupamos por
conseguir caballos de una determinada raza, con buena conformación,
disposición y orígenes, sin darnos cuenta que todos
esos atributos pueden llegar a no desarrollarse sin la adecuada guía y
buen hacer del propietario/jinete/entrenador.
A partir de ahí comienzo mi doma particular intentando ganarme su
confianza, para que ellos me acepten como uno mas de la manada y poco a
poco, entendiendo el comportamiento de los equinos, ellos vayan
aceptando voluntariamente mis decisiones y me convierta
en su líder.
Mis equinos viven libres y disponen a su voluntad del agua y del forraje
durante todo el día. No saben lo que es un box y se defienden de las
inclemencias del tiempo buscando la protección natural que les permite
el terreno donde se encuentran.
Practico con ellos el barefoot y el bitless (pies descalzos y bridas sin
hierro). Para mantener los cascos en su mejor estado y no tener la
necesidad de recortarlos cada 4 semanas, los trabajo diariamente en el
pen round (picadero redondo) durante 45 minutos,
todos juntos y a la voz, de esta manera también consigo la
compenetración de manada necesaria.
Además, hago doma natural de manera individual con cada uno de ellos en
el picadero rectangular y cuando ya tienen la fortaleza ósea y muscular
necesaria empiezo a salir montado en uno de ellos y llevando del ramal
al resto, de esta manera vamos consiguiendo
también la compenetración requerida.
Sobre los cuidados y métodos que sigo para la doma de mis caballos, soy un seguidor de los métodos Horsemanship de Pat Parelli y de Craig Cameron. También del MNC, Manejo Natural del Caballo, de los mejicanos Chico Ramírez y su hijo Guillón y al igual que ellos recomiendo encarecidamente la lectura del libro Doma Alternativa escrito por el famoso veterinario estadounidense Doctor Robert M. Miller y Rick Lamb.
Eres un gran defensor de la equitación natural. Montas bitless, tus
caballos van descalzos, no comen pienso, ¿Cuál es tu visión al respecto?
Si, está claro después de lo que he dicho anteriormente. Desde mi inicio
en el mundo de la equitación, aunque he sido un practicante de la
equitación tradicional o clásica durante muchísimos años, en el fondo de
mi ser siempre albergaba la posibilidad de actuar
con mis caballos de una forma mas “humana” entendido como utilizar
procedimientos en la doma y la monta del caballo con menos autoridad y
agresividad y con mas “humanidad”. Supongo que como aficionado a las
películas americanas del Far West me llamaba mas
la atención como montaban y trataban los indios sus caballos que como
lo hacían los cowboys.
Al cabo de unos años de dejar la competición, hice un curso online muy
interesante e intensivo de doma natural llamado método La Cense,
francés. Después vinieron otros con
Lucy Rees,
Santi Serra y Élisabeth de Corbigny,
asistí a jornadas de “Horse and Humans” organizadas por el famoso
podólogo equino español Rafel Caparrós, con el que también aprendí a
practicar el barefoot y a hacer recortes de
cascos.
A partir de ahí ya estaba preparado para emprender mi sueño “viajar a
caballo”: adquirir unos potros y prepararlos con los nuevos modos de la
doma natural y los nuevos planteamientos de Barefoot y Bitless para
empezar a viajar con ellos.
En el 2010 compré dos potros de un año cada uno, dos P.R.E, los domé y
preparé y adquirí el equipo necesario y adecuado para viajar, tanto de
monta como de carga, asesorándome fundamentalmente de los viajeros a
caballo franceses y muy especialmente de
Émile Brager.
En el 2014 hice mi primer viaje importante. La
vía de la Plata desde Monesterio, al sur de Badajoz, hasta Santiago.
Un viaje de unos 917 km y un mes de duración. Lo realicé con mis
caballos Bronco y Boti y mi perra pastor alemán Luna, durante el mes de
febrero y parte de marzo con unas condiciones climatológicas
muy adversas (fue el momento de las famosas ciclogénesis explosivas).
En la actualidad viajo con mis caballos Pombo, un Há (hispano árabe) de 7 años, Triana una HLá (yegua hispano luso árabe) de 5 años, con Arán y Jara, mulas de 6 y 5 años respectivamente y con mi perra de raza cattle dog, Lily, de 3 años.
Conoces
el mundo del viaje a caballo en otros países, ¿qué crees que
necesitamos en España para difundirlo comparado con países con gran
tradición como Francia?
Francia no tiene parangón en Europa, es el principal referente de viajeros a caballo, a mula o a burro. Francia tiene los mas grandes viajeros a caballo del mundo, alguno como el ya citado Émile Brager, pero también Stèphane Bigo y su mujer Vero y otros muchos y muchas mas
En Francia la Federación de Equitación promociona muy bien el turismo ecuestre y organiza anualmente un gran encuentro llamado Equirando, al que acuden mas de mil jinetes con sus caballos después de tres días como mínimo de ruta. Así mismo, también hay una asociación que organiza cada año otro encuentro similar llamado Equiliberte que tiene el mismo número de participantes. En estos encuentros, de tres días de duración, se comparten experiencias y conocimientos, se imparten conferencias y exposiciones de material, todas relacionadas con el mundo de la equitación y muy especialmente con el turismo ecuestre.
Yo mismo soy socio de CALC,
Association de Cavaliers au Long Course
(Asociación de jinetes de largos recorridos) la cual organiza cada año
dos encuentros de 4 días de duración para tratar temas de viajes a
caballo: ganado, perros, equipo, nudos,
métodos de entrenamiento y preparación, equipos de carga, material de
acampada, etc.
En España nos queda mucho que hacer. La federación está intentando
homologar itinerarios a caballo, la Federación catalana junto a
AMAC (Asociación de marchas a caballo de Cataluña) y otras asociaciones territoriales como
Cowboys de la Selva,
de la cual también soy miembro, están intentando promocionar el turismo
ecuestre como una actividad importante para el desarrollo del mundo
rural. Con tal fin cada año se lleva a cabo un encuentro
emulando a los franceses que se llama Equitrobada, con un número muy inferior de participantes a los encuentros franceses, pero no por ello menos importante.
Y, por último, yo mismo el año pasado organicé el I Encuentro de Viajes a
Caballo en Navacerrada, Madrid, y tres Jornadas sobre Viajes a Caballo,
una en Madrid, otra en Segovia con vuestra asociación y la última en
Cassà de la Selva, Girona.
Quizás este sea el método que seguir para dar a conocer cada vez a mas
gente el mundo de los viajeros a caballo; realizando jornadas y
encuentros y promocionando el turismo ecuestre, y, por ende, los viajes a
caballo como una actividad mas de equitación, pero
también como una actividad que puede ayudar al desarrollo del mundo
rural.
Acerca del I Encuentro de
Viajeros a Caballo
realizado en España ¿cómo fue la iniciativa?¿se van a hacer más?¿cuál es
la esencia de este tipo de eventos?¿crees que pueden triunfar en
España?
Pues también te he respondido en parte a esta pregunta y sobre todo a cuales serían mis deseos en este aspecto.
La iniciativa de las I Jornadas de Viajes a Caballo fue debida a
Álvaro Gracia Mateu.
Álvaro, como gran aficionado al mundo del caballo, al mundo rural y a
la naturaleza, tenía mucho interés en aprender las técnicas de viajar a
caballo y me propuso impartir unas Jornadas
sobre Viajes a Caballo en Navacerrada abiertas a todo aquel que
estuviera interesado. Lo del Encuentro vino después. Se me ocurrió que
aprovechando la infraestructura de las Jornadas podríamos organizar un
Encuentro de Viajeros con la misma filosofía de los
Encuentros que se realizan en Francia. Y así fue como se hizo.
Para el año que viene tenemos ya planificado el II Encuentro de Viajeros
a Caballo que se llevará a cabo, junto a una Jornada sobre Viajes a
Caballo, entre los días 20 y 25 de mayo en Alburquerque, Badajoz, un
pueblo muy próximo a la frontera con Portugal.
Estamos ultimando el programa y en cuanto lo tengamos, seguramente a
finales de la semana que viene, os lo haremos llegar. Un buen amigo,
participante de I Jornada y el I Encuentro en Madrid, Isaac Ambel, esta
llevando la organización de ambas actividades.
La esencia de la realización de Jornadas de Viajes a Caballo es la de
informar y enseñar a aquellas personas aficionadas a la equitación y
deseosas de dar un salto cualitativo importante, como es pasar de
realizar rutas a caballo a realizar viajes a caballo
en total autonomía, que necesitan para hacerlo y como dar ese paso. Las
Jornadas posteriores consistirían en ir perfeccionando los distintos
métodos, procedimientos y capacidades para viajar a caballo: mejor, mas
cómodos, mas seguros y durante mas tiempo.
La esencia de los Encuentros de Viajeros a Caballos es la de posibilitar
el encuentro de aficionados a viajar a caballo, de toda España y resto
del mundo, para compartir unos días de camaradería intercambiando
experiencias, conocimientos e información en todo
lo relativo a viajes a caballo.
Estoy convencido de que ambos eventos pueden triunfar y si conseguimos
llevarlos a cabo en años posteriores, podrían ayudar mucho a potenciar
el turismo ecuestre en general y muy particularmente los viajes a
caballo. Los de este año fueron un éxito en cuanto
a la materia que se impartió, el lugar donde se realizaron, la
organización y el número de asistentes. Debemos conseguir que los
próximos eventos tengan el mismo éxito y que a la finalización de los
mismos se produzca el relevo de los siguientes. Confiemos
que así sea.